Por Arturo Soto Munguia

Pues ahora sí que como anillo al dedo le cayó a la gobernadora Claudia Pavlovich el informe de la Auditoría Superior de la Federación en el que de nueva cuenta resultó con cero observaciones al manejo de los recursos correspondientes al gasto federalizado para el ejercicio 2020, cuyo monto es de casi tres mil millones de pesos.

Este informe llega a solo dos días de iniciar formalmente el proceso de entrega-recepción de la administración estatal, y es importante porque proviene de la entidad que supervisa el ejercicio presupuestal de los tres poderes de la Unión y de las entidades federativas.

De acuerdo con el informe entregado a la Cámara de Diputados federal, se auditó la cuenta pública 2020 del gobierno de Sonora, al que se transfirieron dos mil 879 millones de pesos ese año, los cuales fueron ejercidos con tal pulcritud que la ASF no tuvo una sola observación sobre esos recursos, de acuerdo con el contralor estatal, Miguel Ángel Murillo Aispuro, quien dio a conocer ayer esta información.

Como dato, vale apuntar que las auditorías a las cuentas públicas del estado realizadas por la ASF en 2017 y 2018 también resultaron con cero observaciones, y en la de 2019 Sonora se colocó entre los estados con mejor evaluación en el ejercicio de los recursos federales.

Y eso no es cualquier cosa, considerando que esta vez se revisó el 100 por ciento de los recursos destinados a infraestructura educativa y los recursos que el estado deriva a los municipios por la vía del Fortamun y el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal (FISM).

Eso explica la serenidad con que la gobernadora ha asumido el proceso de entrega-recepción y lo que viene para su séptimo año y los que siguen.

No quería presumirles pero ayer tuve la oportunidad de conversar con ella sobre varios temas, y realmente se observa relajada; la única ocasión en que una sombra de duda cruzó su rostro fue al analizar el resultado del proceso electoral en el estado, pero de eso les platicaremos después, porque se trató de una charla informal.

Lo que sí puedo adelantar es que cerrará su sexenio trabajando y una de las acciones que tiene en la agenda es la inauguración de la planta desaladora que vendrá a resolver el problema de abasto a los municipios de Empalme y Guaymas y eso será a mediados de agosto.

También inaugurará el Hospital General de Especialidades, una obra de la que se siente muy orgullosa porque contará con instalaciones de primera; por cierto ya ha platicado con Alfonso Durazo sobre el destino que tendrá el remozado hospital del bulevar Encinas, a un costado de la Universidad de Sonora.

Como se sabe, el gobernador electo tiene una propuesta para utilizar esas instalaciones como hospital de la escuela de medicina de la Universidad de Sonora, y la gobernadora le ha propuesto que se instale también allí el hospital Chávez del Isssteson, cuya infraestructura y equipamiento ya le queda chico a la derechohabiencia.

Claro, esa es una propuesta y en todo caso será decisión del nuevo gobernador retomarla o no, pero esto revela que entre ambos gobernadores hay una conversación fluida respecto al proceso de entrega-recepción.

Lo que sí es un hecho es que la gobernadora aprovechará la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador que comenzará este día por los municipios fronterizos de Sonora, para plantearle el tema del equipamiento del nuevo hospital. Eso no me lo dijo, pero sabiendo cómo es de insistente, no quitará el dedo del renglón.

Respecto a su futuro, Claudia Pavlovich asegura que no se retirará de la política, pues siempre la ha considerado como una oportunidad de servir a la gente; además es una mujer joven que llegó a la máxima responsabilidad en el estado a la edad de 46 años, de manera que aún tiene pila para seguir en lo que le apasiona.

Antes, se tomará un tiempo para la reflexión y para retomar la convivencia con su familia en condiciones de normalidad, ya que el trabajo de gobernadora necesariamente la obliga a dedicarle menos tiempo del que quisiera, y del que en adelante dispondrá.

En fin, fue un encuentro breve pero tupidito de temas sobre los que iremos desdoblando más adelante.

II

Y a propósito de transiciones, ya iniciaron los trabajos respectivos en el gobierno municipal de Hermosillo al instalarse las primeras mesas ciudadanas propuestas por el alcalde electo Antonio Astiazarán, con el objetivo de elaborar un diagnóstico de cada área y diseñar el plan de acción inmediata de la próxima administración municipal.

La primera mesa que se instaló fue la de Finanzas municipales, que por parte del alcalde electo será coordinada por Alberto Haaz Díaz, un experto en sistemas de planeación y administración estratégica; del análisis que junto a otros especialistas haga saldrán las propuestas para el nuevo gobierno de Hermosillo.

La mesa de Servicios públicos, mientras tanto, será coordinada por Hortensia Galaz Ruiz, presidenta de la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias, quien trabajará al lado de diversos colectivos de jóvenes que traen una interesante agenda ambientalista y del cuidado de los animales, así como de la calidad y cantidad de los servicios que presta el ayuntamiento.

Mientras tanto, la mesa de Reactivación económica estará a cargo de Silvia Álvarez Amaya y su principal tarea será la de proponer acciones que impulsen la generación de empleos, atracción de inversiones, sana competencia y continuidad de los centros de negocios.

A partir del diagnóstico que realicen se integrarán en un equipo para diseñar el Plan de 100 días orientado a atender las prioridades de las y los hermosillenses.

La semana próxima se instalarán las mesas de transición correspondientes a Infraestructura de la ciudad, Transparencia y rendición de cuentas y la de Seguridad Pública.

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